No me gusta la gente
que sonríe
y no lo hace con los ojos
que te miran,
y parece que vean todo transparente,
sin color: blanco o negro.
No me gusta la gente
que viene cuando
ir[se] sería lo más lógico.
Y tampoco la que se queda y
debería marchar cuanto antes
mejor.
No me gusta la gente impaciente
que cree que todo gira a su alrededor y
por eso no entienden
que la espera sea a veces
el anuncio de algo bueno.
No me gusta la gente...
Esa gente que vive de espaldas
a la luz, con mil aristas, opaca,
verde en su interior.
Verde de envidia
y resentida, peleada con el mundo entero
porque sabe que cualquier cosa [una mota de polvo, incluso]
puede hacerla tambalear.
Gente mala, gente que
huye del compromiso y de la coherencia.
Contraria a la ternura,
a la vida:
siempre agazapada, presta a dar el zarpazo,
como una alimaña traicionera
que no goza si no es
haciendo daño.
No me gusta.
Teo.
15 Agosto 2014.